martes, enero 09, 2007

Una venus prehistórica (antes de engordar)


Otro año, la década más rápida de mi vida. Ya nos hemos olvidado del Y2K, del pánico fin de siglo. La odisea del espacio ya es cosa del pasado. El 11-9, el 11-M, el M-19 y los días frescos del siglo. Sí ya casi estamos en el siglo de Buck Rogers, nos hacemos viejos, amigos disculpen; es decir, hemos madurado. Hoy somos piel de otra época, temenos otras perpectivas y sueños. Es mentira. Soy el mismo noventero que supo como terminó Comando Especial. También, soy de los que recuerdan a Mike Tyson y nunca, nunca nadie, llegará a pegar más fuerte. Tampoco olvidaré al Challenger y su espiral en el cielo. Y muchos bla, bla, bla, y otro bla. Ni mierda (como se dice por acá), hoy somos del 21, hoy somos los hinchas que no hemos visto a Santa Fe campeón, hoy somos viejos, el hard - core es viejo, el rock es viejo, los Pixies son viejos, todos lo somos. Mentira, otra mentira, solo estamos más viejos, los jóvenes son otros, los hermanos menores, usted yo no, ella, usted no, los Simpsons son viejos, otros son historia patria. Cada vez escucho más noticias y veo menos programas de MTV, no me trago todo lo que se me pasa por el frente (incluyendo a ellas) y todavía tengo más fe, ya hablo de esta juventud, de los chinos de hoy en día. Me interesa menos la vida en otras galaxias y me preocupo por mis niveles de grasa. Ya soy viejo para algunas cosas y en otras estoy atrasado. Ya debo haber hecho otras tantas y no me asombra nada.
No es una pena, es la terquedad de estar vivo. Ya no seré un cadáver hermoso, ya estoy engordando y ya entiendo como se siente Ally Mcbeal, ya me paso unos minutos de Sábados Felices, ya no hablo mal de Iván Mejia, también recuerdo una banda llamada The Beatles y esa si era música, y demás cliches. Pero, que pase el tiempo y pueda sentirme como se me dé la gana. Bienvenido otro año y que pase, que llegue el 2009, el 12 y el 15 y todos con arrugas y muchos recuerdos. Solo es otro año...