domingo, marzo 09, 2008

¡Teniente Dan!

A veces el saber algo, cualquier cosa, nos vuelve prepotentes. La mirada altiva, la seguridad de verse por encima de la gleba ignorante, de sentirse seguro, de ser alguien. Pero debemos retroceder… ¿El conocimiento es seguro? ¿Todo admite una refutación? De ser así, todo lo que escribo debería estar entre signos de interrogación. La soberbia de los empíricos (la academia, te muestra lo ignorante que eres) es una payasada, son risibles, seres inhumanos (se creen de otro mundo). No quiero el saber que me eleva… si la soberbia me ha acompañado en algún lado, que me acompañe…; pero quiero dudar de lo que sé… La presentación de las ideas está por encima de algunas cosas. El carisma de los genios debería ser una regla. No que los envidiemos, sino que los entendamos y no fastidien. Mi ignorancia repudia algunas cosas. Prefiero el nivel bajo.

Etiquetas: