jueves, abril 03, 2008

¿Trabajar o no trabajar?

Algún día se romperá la dualidad de ser productivo o no ser civilizado. Los sistemas económicos nos llevaron a pensar que el “trabajo dignifica”. Los burros serian dignos representantes de esta regla, que implica relaciones de poder, chismes, chistes, asociaciones productivas, jóvenes trabajadores, niños jugando a la fábrica. La sensación de pasar nueve o más horas en el trabajo, es una permanente imagen de un no-lugar. El lugar de labores es un espacio aparte, que suspende las relaciones yo-universo. Eso significa que nunca nos sentiremos parte del mundo cuando elaboramos informes. Nosotros pasamos más del 70% del tiempo que estamos despiertos, trabajando. Por eso existía el paraíso y nos costo mucho trabajo asumir que estábamos fuera. La soledad del mundo se percibe en un bus a las seis de tarde, donde todos colgados de los pasamanos pensamos en la paga, en la tarea, en la labor a medias o en lo incompleto del mundo. Lo malo de que empiecen las vacaciones o los fines de semana, es que inmediatamente empiezan, se están terminando.

Sí ya sé, que es jueves hasta ahora.